Cuidado de la piel del bebé

¿Hay algo más perfecto que la piel de tu bebé? No puedes resistirte a tocarla y acariciarla. A tu bebé le encanta tanto como a ti.

Proteger la piel delicada del bebé es una responsabilidad importante para los padres. Aquí te contamos lo que necesitas saber y hacer.

La suavidad

Aunque la piel de tu bebé es famosa por su suavidad, también es fuerte y resistente. La piel es el órgano más grande del cuerpo: un grupo de células conectadas para formar una barrera delgada pero firme. La piel se renueva constantemente a lo largo de la vida, y el proceso de renovación comienza incluso antes del nacimiento.

Sin embargo, la piel de muchos recién nacidos es cualquier cosa menos perfecta al principio. No debes alarmarte si ves que la piel se descama o enrojece durante los primeros días después del parto, especialmente alrededor de las muñecas, rodillas y pies. Eso es normal.

Después de las primeras semanas, la piel de tu bebé se rellenará y se suavizará.

Humectantes

Para mantener saludable la piel del bebé, necesitas conservar su suavidad y firmeza natural. Y aunque la piel de tu bebé no se esté descamando, puede hacerle bien ponerle humectantes.

Puedes conseguir productos sin fragancia con ingredientes como aceite mineral o vaselina. Si necesitas asesoramiento, habla con tu médico.

Sea cual sea el producto que elijas, cíñete a él para que la piel de tu bebé no tenga que readaptarse a las diferentes combinaciones de ingredientes de distintos productos.

Protección solar infantil

Los bebés de cualquier edad deben evitar la exposición solar directa. Un bebé puede sufrir quemaduras solares con tan solo diez o quince minutos de exposición, incluso en días nublados.

  • La primera barrera de defensa debe ser la ropa.

  • En días cálidos, viste al bebé con ropa liviana de algodón que le cubra las piernas y los brazos.

  • Asegúrate de que lleve puesto un sombrero de ala ancha siempre que salga.

  • Intenta evitar salir cuando los rayos solares son más perniciosos, entre las diez de la mañana y las tres de la tarde.

  • Cuando estés afuera, trata de mantener a tu bebé en la sombra.

La Academia Estadounidense de Pediatría ha modificado sus políticas acerca de los bebés y el protector solar. Ahora dice que no está comprobado que usar cantidades reducidas de protector solar en bebés pequeños represente grandes riesgos. Es mejor no confiar en el protector solar como reemplazo de la protección que se obtiene mediante la ropa o directamente evitando la exposición solar. Úsalo para cubrir la cara, manos y pies expuestos al sol.

Uñas: proteger la piel de arañazos

Las uñitas de tu bebé son muy delgadas y filosas, y ¡es asombroso lo rápido que crecen! Es posible que debas recortarlas hasta dos veces por semana.

Es importante hacerlo, ya que los recién nacidos pueden arañarse la cara con sus propias uñas.

Consejos para el cuidado de las uñas

  • Usa una lima de uñas suave, alicates o tijeras de uñas de bebé para recortar las uñas de tu bebé. (Quizás te sea más sencillo hacerlo cuando tu bebé está dormido).

  • Para evitar recortar la piel de la punta del dedo junto con la uña, sostén el dedo con firmeza y empuja la yema lejos de la uña cuando cortes.

  • Las uñas del pie crecen mucho más lento y en general son muy suaves. No es necesario que las mantengas tan cortas como las uñas de las manos: con recortarlas una o dos veces por mes es suficiente.

  • Aunque parezca que las uñas del pie están encarnadas, rara vez les sucede eso a los bebés.

  • Llama a tu médico si la piel alrededor de las uñas del pie está enrojecida, inflamada o endurecida.

Cuidado de la piel del pene

Circuncisión: El cuidado de la circuncisión de tu recién nacido no es difícil si sabes qué tienes que hacer. La primera semana después del procedimiento, el pene puede estar enrojecido, y puede aparecer una costra amarilla.

Consejos para después de la circuncisión

  • Mantén el área limpia usando jabón neutro y agua después de cada cambio de pañal.

  • Recubre la cabeza del pene con vaselina para protegerla, y envuélvela con cuidado en una venda de gasa.

  • Tu médico te dirá cuánto tiempo debes dejar la gasa puesta. Si en algún momento sospechas que se ha infectado, avísale a tu médico.

Si tu hijo no está circuncidado, lávale el pene con jabón neutro y agua, al igual que el resto del área del pañal. No intentes mover el prepucio hacia atrás, ya que se retraerá de manera gradual por sí solo, usualmente a los tres años.

Consejos para lavar la ropa del bebé

Detergente: La piel de tu bebé puede ser sensible a los químicos que contiene la ropa nueva, y al jabón y detergente que quedan en la ropa después de lavarla.

  • Lava toda la ropa y sábanas nuevas antes de que el bebé las use.

  • Durante los primeros meses, lava la ropa del bebé separada de la del resto de la familia.

  • Usa un detergente suave y un ciclo de enjuague exhaustivo.

La piel del bebé es delicada y necesita atención especial, estos consejos te ayudarán a asegurarte de mantenerla protegida.